Muchas dietas fracasan. Es lógico, pues son antinaturales y añaden más presión psicológica a la persona que, al cabo de un tiempo, se cansa de tanta lucha. Un peso adecuado llega como consecuencia de mantener unos hábitos de vida armónicos y equilibrados, de forma natural. Sin que supongan un esfuerzo o castigo, sino un goce pleno de la vida.
Las exigencias y preocupaciones desmesuradas, la ansiedad, las creencias erróneas, la baja autoestima y el desconocimiento de nosotros mismos, son factores que, juntamente con hábitos alimenticios equivocados y antinaturales, promueven desequilibrios metabólicos que pueden afectar negativamente al peso de la persona.
Mediante este exclusivo y completo sistema natural e integral se detectan los principales factores que inciden negativamente y se promueve el cambio natural desde su raíz, de forma totalmente acorde a cada persona, con resultados.